Uñas onduladas: causas y solución

Se trata de una condición bastante frecuente, así que vamos a indagar un poco más en ella para que —te toque o no te toque— nunca te pille por sorpresa.

Causas de las uñas onduladas

Los motivos pueden ser varios y nadie como un especialista para hacerte el mejor diagnóstico —de esto último que no te quepa ninguna duda—, pero debajo te vamos a enumerar algunas de las razones más comunes para orientarte mínimamente:

Disminución de la keratina

La keratina es una proteína fundamental para el buen estado de las uñas y un déficit de la misma puede provocar que aparezcan los surcos que nos ocupan.

Consecuencia de un golpe

Seguro que si lo piensas te viene alguien a la cabeza que tenga alguna uña así por culpa de un aplastamiento en el pasado. Pues, lamentándolo mucho, esa deformidad ya sí que será para siempre. Si ese alguien eres tú, tómatelo como una herida de guerra, que da carácter.

Por bacterias o virus

Atacan sobre todo a las uñas de los pies que son más susceptibles a las infecciones. Los hongos, por ejemplo, son capaces de alterar el color, la forma y hasta la textura de las uñas; pero la buena noticia es que bien tratadas volverán completamente a su apariencia original.

En resumen, en caso de notarte las uñas acanaladas (y que no sea por culpa de un “golpazo”) lo mejor que puedes hacer es consultar a tu médico para así descartar patologías más severas que las que te acabamos de enumerar. La anemia, por ejemplo, puede ser una razón habitual.

Tratamiento para las uñas onduladas

Antes de hablar de cómo solucionarlas, permítenos un inciso. Saber si tienes las uñas onduladas es tan fácil como mirarte las manos y detectar o no ligeros canales o abultamientos en la superficie; pero es que resulta que estos pueden presentarse de dos maneras:

• A modo de estrías horizontales o transversales, también conocidas como líneas de Beau, que parten de la misma base de la uña y van replicándose una tras otra a medida que estas crecen.

• Como estrías verticales o longitudinales. Son mucho menos frecuentes y se concentran en el medio de la uña.

Y ahora sí, te decimos todo lo que debes y puedes hacer para tratarlas y disimularlas:

– ¿Lo primero? Acudir a un especialista y, cuando sepas el porqué, intentar camuflarlas y darles los mejores cuidados.

– El objetivo es fortalecer la placa ungueal, para lo cual un must siempre será proteger la superficie de tus uñas frente al esmalte (por muy bueno que sea). ¿Dos sugerencias? La base coat Here to stay, perfecta para suavizar y alisar las irregularidades de tu uña al instante, y Strong Start formulada con biotina, que te ayudará a endurecer y fortalecer tu manicura.

– Acudir a una gama de esmaltes que ofrezca color + tratamiento. Con Treat,Love&Color de essie tendrás la tranquilidad de estar pintando tus uñas sin dañarlas en absoluto y con colores muy a la última. En solo una semana te las notarás más fuertes (60% menos grietas y 35% menos rotura). ¡Adiós a las manicuras agresivas! Por cierto, esta línea está enriquecida con colágeno y extracto de té verde.

– Mantener tus manos (y tus uñas) hidratadas con cremas específicas, pero también prestar atención a tus cutículas. Apricot Cuticle Oil de essie las mantendrás perfectas y supernutridas. Menos cortarlas y más mimarlas.

– Seguir una dieta equilibrada y variada (carne roja, salmón, fruta, huevos, alimentos ricos en vitamina C…).



Para curar tus uñas onduladas es muy posible que necesites ayuda profesional —de hecho, te lo recomendamos—, pero para camuflar esos baches ya te hemos dejado algunas ideas. Ponlas en práctica y presume de manicura como si nada.